Circuncisión y control de la sexualidad masculina

Este artículo constituye la continuación de El doble estándar de las circucisiones masculina y femenina.

Como muchas prácticas culturales, las circuncisiones masculina y femenina han sido ejercidas por numerosos motivos y continuadas por la tradición, incluso cuando las razones originales habían quedado atrás. Uno de los motivos menos conocidos en el caso de la primera es el  control de la sexualidad masculina. Desde la Antigüedad hasta nuestros días se ha aprobado este procedimiento para reducir el deseo sexual y canalizar las energías del varón al servicio del grupo o comunidad.

Veamos por ejemplo qué dicen los autores judíos Filón y Maimónides al respecto (la negrita es mía).

Filón de Alejandría (20 a.C.-50 d.C):

El legislador divino ordenó la circuncisión sólo para los varones por muchas razones. La primera es que el varón encuentra más placer y tiene más deseo por copular que la mujer, y está [siempre] más preparado para ello. Por tanto Él correctamente dejó al margen a la mujer, y suprimió los impulsos indebidos del varón bajo el signo de la circuncisión [Filón, Preguntas y respuestas sobre el Génesis, Libro III, 47].

Maimónides (1135-1204 d.C.):

Con respecto a la circuncisión, creo que uno de sus objetivos es limitar el coito, y debilitar el órgano reproductivo tanto como sea posible, causando así que el hombre se modere. Algunas personas creen que la circuncisión se realiza para eliminar un defecto en la formación del hombre; pero cualquiera puede fácilmente responder: ¿cómo pueden productos de la naturaleza ser tan deficientes como para requerir una finalización externa, especialmente cuando el uso del prepucio es tan evidente? Este mandamiento no ha sido ideado como un complemento a la deficiente creación física, sino como una forma de perfeccionar las deficiencias morales del hombre. La herida corporal causada a ese órgano es exactamente lo que se desea; no interrumpe ninguna función vital, ni destruye el poder de la reproducción. La circuncisión simplemente contrarresta la lujuria excesiva; pues no hay duda de que la circuncisión debilita el poder de la excitación sexual, y a veces disminuye el disfrute natural; el órgano se debilita necesariamente cuando pierde sangre y es privado de su cobertura desde el principio. Nuestros sabios lo dicen distintivamente: es difícil para una mujer que ha tenido sexo con un hombre no circuncidado separarse de él. Ésta es, considero, la mejor razón para el mandamiento de la circuncisión. ¿Y quién fue el primero en cumplirlo? Abraham, nuestro padre, de quien es bien sabido cuánto temía el pecado [Maimónides, La guía de los perplejos, sección III, capítulo 49].

Ibn-al-Assal, teólogo copto/cristiano (1205-1265 d.C.) escribió:

Algunos médicos y distinguidos filósofos afirman que la circuncisión debilita la herramienta del placer, y que esto es unánimemente deseable [Ibn-al-Assal, vol. II, p.418-421].

Tomás de Aquino [1225-1274 d.C.], aunque opuesto a la práctica como la mayoría de la cristiandad medieval, comenta que su imposición:

…tenía como meta disminuir la lujuria, que reside especialmente en estos órganos, debido a la intensidad del placer carnal [Thomas d’Aquin, IaIIae, q. 102, a. 5, ad 1.].

El jurista musulmán Ibn-Qayyim Al-Jawziyyah (1292-1350 d.C.) escribió que la circuncisión (tanto masculina como femenina en este caso) frena la promiscuidad:

Cuando es exagerado [el deseo] transforma al hombre en un animal; y si es aniquilado, lo convierte en un objeto inanimado. La circuncisión, pues, frena este deseo. Por esta razón, nunca encontrarás hombres o mujeres no circuncidados que se sacien con el apareamiento. [Ibn-Qayyim Al-Jawziyyah, en Aldeeb Abu-Sahlieh: Khitan, volumen I, anexo 1.]

Al-Mannawi (¿?-1622 d.C.), otro jurista musulmán, comentó:

Los glandes son muy sensibles. Si permanecen escondidos en el prepucio, esto fortalece el placer durante el apareamiento. Si el prepucio es cortado, los glandes se endurecen y el placer se debilita. Esto se ajusta mejor a nuestra ley: reducir el placer sin suprimirlo por completo, un justo medio entre el exceso y el descuido. [Al-Mannawi: Fayd al-qadir, volumen. 3, p. 503]

Todas las citas se encuentran recogidas en la obra de Dr. Sami A. Aldeeb Abu-Sahlieh, Male and Female Circumcision: Religious, medical, social and legal debate, en las páginas 213-215.

Estos argumentos para la circuncisión masculina pueden parecernos lejanos en el tiempo, pero no lo son. A mediados del siglo XIX el mundo anglófono reintrodujo esta práctica, que había sido abandonada en la Edad Media por la mayoría de los cristianos. Su propósito era el mismo: controlar la sexualidad masculina. A continuación traduciré varias citas de médicos que hasta hace relativamente poco consideraban la circuncisión como una práctica que servía para disminuir el placer del varón y aminorar así sus impulsos sexuales. La negrita es mía:

Un remedio para la masturbación que casi siempre es efectivo en niños pequeños es la circuncisión. La operación debería efectuarse sin administrar anestesia, pues el breve dolor durante la operación tendrá un efecto beneficioso para la mente, especialmente si se conecta con la idea de castigo, como podría ser en algunos casos. [John Harvey Kellog, creator of the Corn Flake, Treatment for Self-Abuse and Its Effects, Plain Facts for Old and Young, Burlington, Iowa: P. Segner & Co. 1888, p. 295.]

Me refiero a la masturbación como uno de los efectos de un prepucio largo. No es que este vicio se halle ausente por completo entre aquellos que han sido circuncidados, aunque nunca vi un caso entre niños judíos de tierna edad, excepto como resultado de su asociación con niños cuyas glandes cubiertas les han incitado naturalmente al hábito. [M. J. Moses, The Value of Circumcision as a Hygienic and Theraputic Measure, NY Medical Journal, vol.14 (1871): pp.368-374.]

Medidas más radicales que la circuncisión deberían, si la opinión pública permite su adopción, ser una verdadera bondad para pacientes de ambos sexos. [Jonathan Hutchinson, On Circumcision as Preventative of Masturbation, Archives of Surgery, vol. 2 (1891): pp. 267-268.]

Clarence B. era adicto al vicio secreto practicado entre los chicos. Realicé una operación orificial que consistía en la circuncisión… Necesitaba el justo castigo del dolor del corte por sus placeres ilícitos” [N. Bergman, Report of a Few Cases of Circumcision, Journal of Orificial Surgery, vol. 7 (1898): pp.249-251.]

Finalmente, la circuncisión tiende a incrementar el poder de control sexual. La única ventaja que supuestamente confiere el prepucio es la de mantener al pene en una condición susceptible a una sensación más aguda que de otra forma no experimentaría. El prepucio puede incrementar el placer del coito y el impulso hacia él, pero éstas son ventajas de las que uno puede desprenderse en el estado actual de la sociedad. Si su pérdida da como resultado un incremento en el control sexual [en ambos casos se refiere a menos sexo, no a más poder de control por parte del varón], uno debería estar agradecido. Editor, Medical News. Our London Letter. Medical World, (1900) vol.77: pp.707-8]

Se ha instado como argumento contra la adopción universal de la circuncisión que la extracción de la cubierta protectora de los glandes tiende a anestesiar la sensibilidad de esa exquisitamente sensible estructura y por tanto a disminuir el apetito sexual y los efectos placenteros del coito. Si damos por hecho que esto es cierto, mi respuesta es que, cualquiera que haya sido el caso en el pasado, la sensualidad de nuestros días no necesita látigo ni espuela, sino que vendría mejor un uso algo más juicioso de la contención y las riendas para el comportamiento. [E. Harding Freeland, Circumcision as a Preventative of Syphilis and Other Disorders, The Lancet, vol. 2 (29 Dec. 1900): pp.1869-1871.]

Otra ventaja de la circuncisión… es la reducida propensión a masturbarse. Un prepucio largo es irritante de por si, ya que necesita más manipulación de las partes durante el baño… esto lleva al niño a tocarse las partes y, por norma general, sensaciones placenteras son despertadas en esta membrana mucosa extremadamente sensitiva, resultando en manipulación y masturbación. La exposición de los glandes del pene tras la circuncisión… reduce la sensibilidad del órgano… Por tanto reside en el médico -el consejero familiar en temas médicos y de higiene- promover su aceptación. [Ernest G. Mark, Circumcision, American Practitioner and News, vol. 31 (1901): p. 231.]

La circuncisión no sólo reduce la irritabilidad del pene del niño, sino también la llamada pasión de la que tantos hombres casados están extremadamente orgullosos, en detrimento de sus esposas y su vida matrimonial. Muchas violaciones juveniles podrían prevenirse. También muchas separaciones y divorcios. Y muchos matrimonios infelices podrían mejorarse si esa pasión antinatural fuera cortada a tiempo con una circuncisión. [L.W. Wuesthoff, MD. Benefits of Circumcision. Medical World, (1915) Vol.33. p.434.].

Sugiero que todos los niños varones sean circuncidados. Esto va “contra natura”, pero ésa es precisamente la razón por la que debería hacerse. La naturaleza busca que los varones adolescentes copulen con tanta frecuencia y promiscuidad como sea posible, y para ese fin cubre los glandes sensibles, de modo que siempre estén dispuestos a recibir estímulos. La civilización, por el contrario, requiere castidad, y los glandes de los circuncidados rápidamente asumen una textura curtida menos sensible que la piel. Así el adolescente tiene centrada su atención en su pene con mucha menos frecuencia. Estoy convencido de que la masturbación es mucho menos común entre los circuncidados. Teniendo estas consideraciones en cuenta no parece apropiado razonar que “Dios sabe mejor cómo hacer niños pequeños”. [R.W. Cockshut. Circumcision. British Medical Journal, Vol.2 (1935): p.764.]

Aunque este detalle es menos conocido, la circuncisión femenina también se reintrodujo en el mundo anglófono del siglo XIX con fines similares, pero su práctica cesó a inicios del siglo XX, con excepción de Estados Unidos, donde se mantuvo hasta la década de los 50. La circuncisión masculina se mantiene hasta nuestros días en los países anglófonos, mientras que la femenina, incluso en formas menos agresivas que la masculina, está prohibida por ley.

El mundo occidental continúa defendiendo la práctica por razones religiosas o médicas, pero el argumento de controlar la sexualidad masculina pervive actualmente en el mundo musulmán, como Dr. Aldeeb Abu-Sahlieh menciona en su obra (p. 232-234).

Teniendo además en cuenta que hay muchas culturas donde la circuncisión femenina no es practicada pero sí la masculina, no es posible afirmar que la femenina es moral o ideológicamente más problemática. Una vez más, animo a que tanto la circuncisión masculina como la femenina se traten en el mismo contexto y ambas sean igualmente condenables cuando se realizan sobre personas menores de edad incapaces de dar su consentimiento y sin necesidad médica.

42 comentarios sobre “Circuncisión y control de la sexualidad masculina

    1. Ése es uno de los problemas cuando se habla de este tema, aunque el artículo no lo diga de forma explícita: que le pueden acusar a uno de antisemitismo. Por otra parte, y quizá alguien con más conocimiento del judaísmo me podría decir, aunque la circumcision se recomienda para el octavo día, no recuerdo que haya ningún impedimento para que este rito se pueda hacer cuando la persona es ya adulta y capaz de dar su consentimiento. En terminos de fe, tendría más valor que si te lo hacen sin tú haber consentido.

      Reconozco también que me hace gracia que la autora cite a Maimonides para reforzar su argumento. Estaría bien que recordara lo que Maimonides dijo en la cita que he señalado en esta entrada.

      Creo que tendría que abordar el artículo punto por punto para corregir los argumentos que presenta, porque he visto que algunos de ellos son falsos y no se ha molestado en indicar en qué estudios o fuentes se apoya para mantenerlos.

  1. Por supuesto no. Soy atea, pero tengo muchos amigos religiosos incluyente judios, y para ellos, es un deber serio. Ademas, es una senal de ser judio, asi tienen dos razones fuertes para continuar su tradicion de circuncision. Las razones no son mas importantes que los derechos de los ninos, pero la historia y la antropologia de la circuncision judia nos ayudan entender la dificultad que los judios tienen en abandonar la practica.

    1. Gracias, Lillian. Estoy de acuerdo. Los derechos del niño deben prevalecer, aunque también es necesario entender que no es fácil para ellos cambiar una tradición que forma parte de su identidad y que constituye un deber religioso.

  2. Buenas:

    Creo que es la primera vez que veo que alguien lo explica con pelos y señales. Hasta ahora yo también creía que era «el pellejito» y lo tenía muy banalizado. Espero que, al menos, en alguien totalmente profana en temas médicos, sea comprensible e incluso perdonable:) . Siempre he dicho (y lo mantengo) que a veces hay mucha más ignorancia que mala leche cuando alguien no da importancia a un tema.

    Tengo que decir que, a partir de ahora, estoy RADICALMENTE en contra de la CM (de la CF ya lo estaba). A partir de ahora, cuando vea mencionar «el pellejito» o que «no es para tanto», trataré de explicar que no es así ni de coña.

    Estoy totalmente en contra de cualquier «metida de tijera» en un cuerpo humano, que no esté totalmente justificada por razones médicas. Y eso incluye (lo habéis mencionado, banalizándolo) la episiotomía, que sí, es otra forma en que te pueden castrar, muchas veces de forma innecesaria (por prisas, por comodidad del médico…).

    Y ya como corolario decir que las religiones y las Iglesias, pese a que se llenen la boca, queda demostrado que no traen nada bueno al pueblo llano, sólo han buscado manejarlo y controlarlo a su antojo; todo esto que expones es otra prueba más de ello.

    Un saludo.

    1. Gracias, Mamisepa. Me alegro que estas entradas te hayan resultado informativas. No creas tampoco que yo siempre he sabido esto. También tuve mi época de no darle importancia.
      Por mi parte no me he pronunciado sobre la episiotimía porque no estoy familiarizado con ella, aunque otros comentaristas lo hayan hecho. Pero al igual que tú, estoy en contra de este tipo de operaciones cuando no hay necesidad médica alguna, salvo que la persona sea mayor de edad y sea su decisión.

    2. «Estoy totalmente en contra de cualquier “metida de tijera” en un cuerpo humano, que no esté totalmente justificada por razones médicas. Y eso incluye (lo habéis mencionado, banalizándolo) la episiotomía, que sí, es otra forma en que te pueden castrar, muchas veces de forma innecesaria (por prisas, por comodidad del médico…).» (mamisepa)

      Yo no creo que nadie haya banalizado el tema de la episiotomía. Por mi parte, y me reitero en ello, lo que no puedo es comparar la episiotomía con la castración, la ablación y la circuncisión. En todo caso, además, lo que sí es banalizar es introducir el tema de la episiotomía en el contexto de las mutilaciones sexuales (castración, CM y CF), pues ello equivale a poner todas esas mismas prácticas al mismo nivel de daño y secuelas, no dejando ver con lo que -en teoría- aporta más beneficios que daños, lo que realmente sí es obvio que deja secuelas. Y añado que quien hizo primeramente mención a la episiotomía en este foro fue kuxille, para así inflar la cifra de mujeres víctimas de mutilaciones sexuales, con lo que desnivelaba a su favor (a favor de que las mujeres son siempre las más víctimas de entre las víctimas) los datos aportados por Carlos comparando CF y CM.
      La castración, la CF y la CM se practican por motivos políticos, religiosos, culturales, por violencia sexual, e incluso es fomentada por causas económicas (la CM es un gran negocio para ciertos médicos norteamericanos). La episiotomía, en cambio -y al igual que la operación por fimosis- se supone que es una práctica por razones sanitarias.
      Yo no soy profesional de la medicina -y aunque lo fuese tampoco parece haber acuerdo entre ellos en este tema-, por lo que no puedo pronunciarme acerca de si la episiotomía es recomendable o no (véase http://es.wikipedia.org/wiki/Episiotom%C3%ADa). Quizá sea muy ingenua, pero me resisto a pensar que la episotomía sea una cuestión de «prisas» o de «comodidad del médico» (por cierto, cada vez son más las MÉDICAS, y por tanto presumiblemente más sensibles ante lo que puedan hacerle a sus iguales). Más bien tiendo a pensar que estamos ante distintas escuelas de medicina; ante distintas prácticas sanitarias que la experiencia se encargará de demostrar si eran válidas o desacertadas. La medicina es así, se aprende y se avanza a base de experimentar, por duro que parezca…
      En lo que sí creo que podemos estar de acuerdo todos los que aquí participamos es en que la episiotomía debería ser una práctica que obligatoriamente contase con el consentimiento de la mujer a la que hipotéticamente se le practicase, y después de estar debidamente informada sobre las posibles ventajas y riesgos que aquella conlleva.

      1. Hola, sólo comentar que como profesional de la salud te comento que la episiotomía es un procedimiento que es bastante necesario en casos de emergencia, donde el canal de parto sea demasiado estrecho y no permita el paso de la cabeza del bebé, en esos casos es más fácil y tiene mejores resultados estéticos y funcionales el reparar un corte limpio en el tejido que un desgarro.. De no ser así, no la recomiendo para casi nada, pues sí hay varios colegas que la utilizan para apresurar el parto, aunque no fuera necesaria y eso es lo que ya no está bien. Saludos

  3. Lola Sandra, ahora mismo no puedo responderte como debería ser (poniendo enlaces serios) porque tengo todas mis energías centradas en otro asunto. Si en otro momento puedo, me pongo con ello. Un saludo.

    Carlos: corregido.

    1. Pongo este enlace para incidir en la idea de que no se puede ni debe tratar a todas las mujeres como si fueran unas feministas radicales, excluyentes y androfóbicas. Ellas (al igual que ellos) también pueden ser manipuladas por la política y las informaciones de los medios.

  4. A pesar de que me ha gustado la reunión de citas sobre la circuncisión como una práctica para el control de la sexualidad masculina, me parece terrible y vergonzoso tratar de equiparar en cualquier caso la circuncisión con la ablación de clítorix. Lo equivalente a ella en los genitales masculinos sería cortar el pene completo.

    Que seas antifeminista y culto no me impresiona en absoluto.

    Carlos Rodríguez: Como expliqué en mi política de comentarios, centrémonos en los argumentos, no en quien los realiza.

    1. Te recomiendo leer la entrada anterior, enlazada al inicio del artículo. Allí explico que tanto la circuncisión masculina como la femenina no son prácticas monolíticas. Algunos tipos de circuncisión masculina son más graves que otros tipos de circuncisión femenina y viceversa. Aunque eso sí, los casos más extremos de la femenina son más graves que la masculina, como también indiqué en el texto.

      También puedes ver fotos de la circuncisión masculina de tipo 2 en ese artículo y un vídeo en la sección de comentarios, si consideras que no podemos hablar de ambas prácticas en el mismo debate.

      Dices: «Lo equivalente a ella en los genitales masculinos sería cortar el pene completo.»

      ¿En qué te basas para realizar tal afirmación?

    2. ¿Y los muertos, olaya, tampoco son equiparables? ¿Los niños varones que mueren a consecuencia de la circuncisión no te parece tan terrible y equiparable a las niñas que mueren a consecuencia de las mutilaciones sexuales que se les practica a ellas? ¿No te parece terrible y vergonzoso, olaya, que los niños mueran al ser circuncidados, y que luego sus prepucios sean empleados por la industria cosmética para que algunas mujeres rejuvenezcan su piel? Puestos a realizar prácticas «equiparables», ¿condenarías también la ablación cuando ésta afecta únicamente a los labios vaginales (que vienen a ser el equivalente del prepucio masculino)?
      Lo que sí impresiona no es que alguien sea feminista o antifeminista, sino que después de los datos aportados en este blog sobre los estragos que provoca la circuncisión masculina, algunas personas sigan practicando el negacionismo (no admitir que los varones también pueden sufrir) simplemente para no abdicar de sus dogmas de género.

  5. ¿El mundo occidental continúa defendiendo la práctica por razones religiosas o médicas? Nunca había oído esto.

    A parte de que los cristianos no deben circuncidarse, los romanos creo que tampoco lo hacían y lo consideraban salvajismo ¿no?. No lo sé seguro lo de los romanos. Pero ahí tenemos las culturas que definen al mundo occidental .

    Por ejemplo Estados Unidos es considerado un país occidental pero muchos de sus médicos son judíos. Así que supongo que depende de lo que entendamos por occidental.

    Estas prácticas son totalmente dañinas para hombres y mujeres , esperemos que llegue el día en que ya no se practiquen en ningún sitio.

  6. Muy buenos datos. Te felicito por tu estudio y el trabajo que te tomaste para realizarlo. Soy de los que piensan (con razón) que tanto la CF como la CM son mutilaciones y no deberían estar permitidas , salvo casos de emergencia. Espero que sigas con tus investigaciones y llegues lejos creando conciencia y enseñando lo que muchos ignoran. Saludos desde Argentina

  7. Son muchas las personas (sobre todo las feministas) las que creen que solo se intenta controlar la sexualidad femenina. El artículo y demás aportaciones demuestran que no es así. Cabe recordar aquí algo que ocurrió hace apenas unas décadas: A los chicos (y no chicos) se nos decía que la masturbación producía ceguera. Tal vez se me replique esto lo decían los curas y que, por tanto, era un control de tipo religioso, a diferencia del control que sufren o sufrían las mujeres. Sería una réplica sin sentido, pues es evidente que los preceptos religiosos relativos a la sexualidad estaban dirigidos a ambos sexos. Los sacerdotes no hacían distinciones en sus sermones. En caso de duda, conocida la lujuria masculina, el precepto señalaba más a los hombres que a las mujeres,

  8. Yo tenia fimosis y el medico me recomendo circuncision. Ya no siento nada. Me siento victima de esta sociedad

    1. A mi la circuncision me a destrozado la vida,psicológicamente hundido desde ento ces me e pasado varias veces por hospitales psiquiátricos y ahora estoy a base de pastillas para mitigar el dolor,sufro de ausencia de
      emociones sensoriales además de fuertes dolores de cabeza esto sin contar con la pérdida de placer del pene y la sensibilidad del glande,sin duda se sufre como una castración y un castigo psicológico duro.

      1. ¿de donde eres?.
        no te imaginas como peleo el asunto.
        escribeme. (escribirme)

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